domingo, 28 de febrero de 2016

UNA MIRADA CRITICA TV: FULLER HOUSE (TEMPORADA 1)


Si en tu adolescencia amaste FULL HOUSE entonces es posible que se sorprenda cuando abras el primer episodio de la serie reinicio de Netflix, FULLER HOUSE. La dependencia del episodio piloto es sobre la nostalgia y es en realidad donde el nuevo espectáculo tropieza, mientras que la serie comienza a trabajar cuando Fuller House mira hacia adelante en lugar de hacia atrás - aunque estructuralmente el espectáculo sigue siendo el mismo que su predecesor.

Fuller House comienza cerca de 20 años después del final de Full House, con Danny Tanner (Bob Saget) listo para salir de su casa que había estado compartiendo con su hija recién viuda D. J. (Candice Cameron Bure). En última instancia, decide salir de la casa a D. J. para darle un lugar para criar a sus tres hijos: Jackson (Michael Campion), Max (Elias Harger) y el bebé Tommy (Dashiell y Fox Messitt).

En lugar de que Danny decida quedarse con ella en lugar de continuar su plan inicial, la hermana menor de DJ, Stephanie (Jodie Sweetin que es muy WOOW) decide abandonar su exitosa carrera como DJ para ayudar a su hermana y su mejor amiga Kimmy Gibbler (Andrea Barber) está de acuerdo en irse a vivir con su hija Ramona (Soni Nicole Bringas). Esto, obviamente, es paralelo al inicio cuando Joey (Dave Coulier) y Jesse (John Stamos) deciden lo mismo con Danny cuando este enviudo.

Es una sólida puesta en marcha en el papel, pero en la ejecución del piloto se apoya tanto en la nostalgia que es difícil de conseguir algo mas. Entre rompiendo la cuarta pared burlandose de las gemelas Olsen (esto sucedió varias veces a lo largo de la temporada) para ir debilitando toda la resonancia emocional de la historia para amplificar la diversión del episodio de la reunión, no es difícil imaginar muchas personas acabado ese episodio y no ir  más lejos solo que seas un fan nato.

Eso es una vergüenza, porque como Fuller House continúa a través de la temporada 1, se pone mejor. La serie no puede resistirse en mostrar a alguno de los personajes originales adultos en la mayoría de los episodios - Joey trata de cuidar a los niños, Danny se detiene por una visita y es sobreprotector de DJ, Jesse y Becky (Lori Loughlin) celebran su boda de 25 aniversario - pero sólo realmente hace clic cuando la atención se centra en DJ, Stephanie y Kimmy como las nuevas Danny, Jesse y Joey (respectivamente).

Estos son los momentos más llenos en FULLER HOUSE, en el buen sentido. Si no fuera un fan de la original, esto no va a ser la versión de la historia que gana más, pero si lo hizo como la comedia familiar de Jeff Franklin, la dinámica familiar invertida funciona bastante bien. Con Ramona uniendose a la familia en contra de su voluntad y Jackson en sus problemáticos días pre-adolescentes, que causan un montón de problemas y una cantidad relativamente decente de humor. El personaje que más me sorprendió encontrar en mí es Harger como Max, quien con solo 7 años a logrado sacar la mayoria de las risas que el show me provoco.

En cuanto a las tres protagonistas, esto es en gran medida la historia de D. J.. Stephanie se marginó la mayor parte; sus luchas con renunciar a su carrera y tratar de caer en el amor apenas sobre ella es una hermana de apoyo, la tía fresca y mala niñera. El arco de Kimmy funciona porque Barber es grande en el papel, y ella realmente vende el viaje emocional de Kimmy luchando con sus sentimientos por su ex. Ambas giran en torno a apoyar y D. J., cuyo lugar de trabajo se llega a visitar y cuyo amor a la vida se convierte en el centro de su historia.

Una vez más, es cuando estos personajes y sus hijos están juntos que Fuller House se eleva por encima de la mediocridad. Por desgracia, esto ocurre con muy poca frecuencia. Las apariciones repetidas, tanto de los miembros del reparto anterior y un extraño conjunto de figuras de la cultura pop, arrastra hacia abajo el espectáculo más o menos cada vez que vienen en la pantalla. la apariencia de Macy Gray en el episodio 3 es tan llano que es doloroso, los cameos del mismo episodio de Maksim y Val Chmerkovskiy es difícil de ver y demasiado meh (si usted no lo sabía, Bure estaba en una temporada de Bailando con las estrellas), y el arco de un solo episodio de Los Gigantes de San Francisco con su jardinero derecho Hunter Pence nunca se siente necesario o más de un guiño para la audiencia.

Algunos chistes hicieron el trabajo para mí: Stephanie robando el nombre de "DJ Tanner" profesionalmente, los primeros pasos de Ramona en sus tacones altos, el gag repetido de Max de ser un padre exasperado al nuevo perro cometa Jr. Jr. y casi todo con Kimmy Gibler . Lo que no funcionó: líneas como "¿y si el Uber ve mis tetas," las apariciones repetidas y terribles, la excesiva dependencia de las frases de Full House (más como "no, Mylanta"), el acento británico de Stephanie en el piloto, la secuencia de baile estilo Bollywood (WHYYYY?) y los golpes continuos en ausencia hacia las gemelas Olsen 'que acaba de hacer los actores y escritores mirarse amargados por que no aceptaron volver.

Humor aparte, había muchos momentos en los mensajes de la serie que aterrizaron. Como fan de Full House o Tres x Tres como lo conocimos aqui y con la que creci, hubo episodios de ese espectáculo que se me quedó por años; en particular, el episodio en el D.J. intentado matarse de hambre a sí misma solo por que queria verse mejor en traje de baño. Fueron esos momentos personales donde el espectáculo podría ser algo más que una comedia divertida familiae, y yo soy la prueba de que lo hacen tener un impacto en los espectadores jóvenes impresionables.

Esos momentos no existen en Fuller House, sobre todo porque el espectáculo se centra mucho más en loslos adultos que de los niños de Full House y menos en las estrellas más jóvenes de la nueva serie. Hay una oportunidad de explorar lo que sucede cuando los padres se separan y le dicen a los niños que está bien, y en su lugar ofrece la alternativa de cuento de hadas en su lugar.

El espectáculo hizo un buen trabajo cuando finalmente se ocupó de la pena de DJ por el fallecimiento de su marido y el impacto que tuvo en sus hijos, pero con demasiada frecuencia de resonancia se perdió cuando se cambió el enfoque de la comedia de su necesidad de elegir entre sus dos intereses amorosos potenciales. Es frustrante, Fuller House debería haber llegado a la conclusión de que debería centrarse en D. J. como una persona en lugar de alguien atrapado en un triángulo de amor al estilo de Bachelor. (Aquí hay una explicación simple de por qué había un enfoque Bachelor fue pesado, por cierto).

El gran problema con Fuller House es este nuevo espectáculo no va a inspirar el mismo tipo de nostalgia que hizo la original. Este no es el tipo de espectáculo que encaje con los espectadores hoy en día, y ninguno de los actores o historias es tan standout que sería notable por el hecho de que no sea que está continuando una historia que la gente se preocupaba hace aproximadamente dos décadas o nada. La excesiva dependencia de las escenas de flashback a Full House acaba de subrayar lo mucho que este nuevo espectáculo no se sostiene por sí mismo, cuando a finales de la temporada 1 comenzaba a darlos.

Del mismo modo problemático es el público el espectáculo está tratando de apuntar. Fuller House es tan adecuado para familias, como su predecesor (con tortazos similares en todo, para mejor o peor), pero el objetivo de la muestra es los adultos, lo que podría no agarrar el público más joven el espectáculo debería apuntar. Curiosamente, la lección de Fuller House parece estar pasando por es que está bien que los adultos crezcan incluso después de que ya no son niños. No siempre funciona, pero es lo más ambicioso Fuller House tiene a su favor eso y la nostalgia. Un buen intento que ojala recibe su segunda oportunidad.

Calificación Temporada 1: 6/10

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